La Diputación de Segovia contará con 15,8 millones de euros de Remanente de Tesorería tras la liquidación del Presupuesto de 2024. Esta cantidad, arroja un indicador de salud financiera del 19,10% sobre recursos ordinarios, según el informe del Interventor. En este sentido, el nivel de endeudamiento de la institución provincial sigue bajando y se sitúa en el 19,10%, frente al 29,28% de 2024 y el 38,65% de 2023. Además, si hablamos de ahorro neto en relación también a esos recursos ordinarios, el porcentaje se sitúa en el 25,96%.
Por otro lado, y en los términos que se recogen en la Ley de Estabilidad Presupuestaria, la institución provincial cumple en todos los parámetros: deuda, estabilidad y regla de gasto; y cuenta con 9 millones de euros de superávit, atendiendo a su capacidad de financiación. Para el presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente, “estas cifras nos dan aire, nos permiten el uso de nuestra acción de Gobierno sin ningún tipo de injerencia externa y, por supuesto, sin tener que someternos a la disciplina fiscal del Ministerio de Hacienda”. En todo caso, “este nivel de disponibilidad presupuestaria no sale de la inejecución, sino de la gestión de recursos que no estaban previstos inicialmente en el Presupuesto y que a lo largo del año han ido llegando a los diferentes servicios; es decir, desde la acción de Gobierno se han ido generando recursos extraordinarios”, tales como las ayudas al sector primario, a programas de Empleo, Servicio de Ayuda a Domicilio o el Plan de Confloenta, entre otros…, ha explicado el presidente.
Y es que, tal y como ha recordado De Vicente, “venimos de cuatro años de vacaciones fiscales y actualmente no contamos con referencias anteriores, por eso debemos seguir siendo prudentes ya que este año, el Gobierno de España, en esa falta de gestión permanente que sufrimos, todavía no se ha pronunciado sobre el uso de estos fondos a través de las Inversiones Financieramente Sostenibles y ese superávit sólo podría destinarse a la reducción de deuda, pues debido a la debilidad e inestabilidad del Gobierno en sede parlamentaria, esta normativa ha quedado aparcada”.Además, cabe destacar que el nivel de endeudamiento de la institución provincial sigue bajando y se sitúa en el 19,32% respecto a los recursos ordinarios y que, además, se cumple la regla de gasto, situándose el techo de gasto en un 2,6%, de manera que se cumple por 706.000 euros.
Con todo esto, la salud financiera de la institución provincial supera el notable alto, más aún teniendo en cuenta que la elaboración del Presupuesto para 2025 se ha hecho por primera vez en la Historia sin recurrir a crédito. Por eso, Miguel Ángel de Vicente ha vuelto a reiterar que “continuamos haciendo las cosas bien, con más inversión en nuestros pueblos y más servicios para las personas que viven en ellos, teniendo además nuestra casa limpia y saneada”.
Por último, en cuanto al nivel de ejecución presupuestaria, se sitúa de nuevo en cifras sobresalientes, pues el nivel de gestión del Presupuesto definitivo es del 93,50 % y el nivel de ejecución sobre el Presupuesto inicial del 90,12%. Una gestión presupuestaria que ha sido remarcada por el presidente como “un trabajo planificado y conjunto de todos los compañeros del equipo de Gobierno” y con unos datos “dignos de resaltar” por dos circunstancias: por un lado, la llegada de ingresos no previstos inicialmente, donde el apoyo de la Junta de Castilla y León se vuelve a manifestar de manera directa, junto con el acceso a los Fondos Europeos; y, por otro, la financiación plurianual de varios proyectos (Plan Extraordinario de Sostenibilidad y Eficiencia, Plan de depuración de aguas residuales, Plan de Sostenibilidad Turística…).